Lo primero es lo primero: exfóliate bien los labios. Te vas a dar cuenta de que nuestros exfoliantes labiales saben muy rico ¡porque están hechos a base de azúcar!Elige tu sabor favorito, quítale la tapa al frasquito, toma un poco del exfoliante con un dedo y masajea suavemente los labios. La combinación dulce del azúcar granulado y aceite orgánico de jojoba ayudará con las resequedades y te dejará los labios frescos y preparados para todo. Cuando termines, lámete los labios, sécalos a toquecitos y repite cuando te haga falta. La gente, inexplicablemente, suele repetir este último paso… ¿Por qué será?
Hidrata
Continúa tu rutina con alguno de nuestros bálsamos labiales. Si te gusta el dulce, Rose Lollipop, Key Lime Pie y Honey Trap son una buena opción; si prefieres algo más neutro, tienes Lip Service y None of Your Beeswax. Independientemente del que elijas, calienta un poco el bálsamo con el dedo del medio, aplícalo en los labios (que estarán estupendos, porque te los acabas de exfoliar) y deja que los aceites y las mantecas hagan su trabajo. Siguiente paso: ¡pongámonos creativos con un poco de color!
¡Hora de lo más importante!
Nuestros labiales son veganos, cruelty-free y vienen sin envase porque forman parte de una colección de repuestos. Además, tienes 5 hermosos tonos disponibles. A la hora de utilizar uno de nuestros labiales, retira la cera negra de la base y colócalo en un tubo reutilizable para cuya fabricación no se ha utilizado plástico. Una vez esté bien acomodado, retira el envoltorio de cera restante. Voilà, todo listo. Usa la punta del labial para aplicarlo con precisión. Si quieres aún más precisión, utiliza nuestra brocha de maquillaje plegable; de esta forma podrás perfilar los labios y extender el color. Échale una mirada a nuestros bálsamos y exfoliantes de labios y también a nuestros labiales veganos.