Despierta tus sentidos con nuestros body sprays

Despierta tus sentidos con nuestros body sprays

Si alguna vez pasaste al lado de alguien que olía increíble y te quedaste pensando “espera, ¿qué fue ese olor?”, debes saber que existe una palabra para esa estela que deja una persona al pasar (bueno, en francés): sillage.

Los aromas son capaces de hacer cosas maravillosas, pueden traer a la mente recuerdos felices o transmitir una sensación de paz instantánea.

Las fragancias pueden hacer por ti mucho más de lo que imaginas, por eso en Lush las hemos convertido en dosis de relajación, buen humor o energía, combinando aromas deliciosos en body sprays que no podrás dejar de rociar por todo el cuerpo. Pero antes de nada descubre cómo puedes sacar el máximo partido a tu fragancia favorita.

Lo primero es lo primero, ¿Qué son los body sprays? Estas fragancias, hechas a partir de una base de alcohol, suelen tener un aroma menos concentrado que los perfumes. Cuando hace calor son como un soplo de aire fresco, perfectos para levantar el ánimo. Una auténtica inyección de energía que ayuda a refrescar cuerpo y mente. Despiertan los sentidos.

Cómo aplicarse una fragancia correctamente
Sí, sí, ¡así como lees! Hay una forma correcta de aplicar una fragancia, bueno, de conseguir que tenga un olor más intenso y duradero. Se recomienda su aplicación en las zonas del cuerpo donde late el pulso: orejas, clavícula, muñecas y rodillas. En estos puntos, que se conocen también como puntos de pulso, la temperatura es más alta lo que ayuda a evaporar la fragancia e intensificar el aroma.
¡No te olvides del pelo!
El pelo es un perfecto difusor de aroma porque retarda la transición de las distintas notas de un perfume, consiguiendo que dure más tiempo y dejando un delicioso rastro olfativo. Ya sabes que el body spray tiene alcohol entre sus ingredientes, por eso, en vez de aplicarlo directamente en la melena, es mejor vaporizarlo al aire y atravesar después la nube de perfume o aplicar el spray a un cepillo y después pasarlo por el pelo.
Duerme como un tronco
Perfumar la piel y la habitación antes de ir a dormir es el ritual perfecto para crear una atmósfera de paz. Hay algunas fragancias que son especialmente relajantes como el ylang ylang, el jazmín, la lavanda y la bergamota. Estos aceites esenciales ayudan a reducir el ritmo cardiaco, calmar el sistema nervioso y mejorar el ánimo. Cuando el reloj marque la hora de ir a la cama, rocía Twilight por la habitación y respira profundamente. Antes de llegar a la tercera oveja ya estarás durmiendo. Además, si utilizas siempre el mismo spray por las noches asociarás ese olor con la relajación y la hora de dormir. Prueba también a rociarlo sobre la almohada, la ropa de cama y el pijama así siempre olerá a lavanda y el aroma permanecerá más tiempo. Otra idea en la que quizás no hayas pensado es la de perfumar las cortinas para que cada vez que las abras o cierres disfrutes de tu olor favorito. ¿Suena bien no?
Armarios y cajones

Seguro que te has dado cuenta al entrar en el ascensor que alguien acababa de pedir pizza o de bajar la basura (maldita la hora) o, al contrario, que tu vecina del quinto llevaba esa colonia que tanto te gusta. Los ascensores suelen retener los olores a la perfección, como si fueran cabinas que no dejan escapar ni una nota o matiz. Este mismo efecto lo puedes reproducir en tus armarios o cajones si quieres que huelan a tu spray favorito, solo tienes que vaporizarlo a una distancia prudencial de la ropa y cerrar la puerta o el cajón rápidamente para que pueda retenerlo.

 

Pulveriza un par de veces tu body spray y cierra la puerta del armario, de esa forma se conservará el olor de manera sutil y también se impregnará en la ropa. Esto es genial para refrescar prendas que utilizamos a diario, pero que no se lavan de forma tan habitual como los abrigos.