Las calabazas (también conocidas como zapallo) forman parte del género en el que también se incluyen el pepino, el calabacín y la calabaza Butternut, todos ellos nativos de América. ¡Europa tuvo que esperar hasta el siglo XVI para descubrirlos y saborearlos! Cosechada en octubre, la calabaza se convirtió en un símbolo emblemático de la celebración americana de Halloween (que también es en octubre). Este gran vegetal es fácil de tallar y de transformar en una calabaza de Halloween, más que su predecesor, el nabo. Por supuesto, lo que sobre después de tallar la calabaza se puede utilizar para cocinar algún plato rico y, por qué no, para preparar una maravillosa mascarilla facial.

• La carne de la calabaza es rica en vitaminas A, E y C y deja la piel suave y jugosa. Contiene enzimas y alfahidroxiácidos (AHA) que exfolian suavemente la piel.
• Las semillas de calabaza son una decoración biodegradable estupenda para poner en los jabones y, cuando se trituran, le dan a la piel una exfoliación natural.
• El aceite de calabaza y la manteca, que se obtienen de las semillas, son hidratantes, suavizantes y rejuvenecedores para la piel. El aceite también contribuye a darle forma al aroma con unas notas singulares a frutos secos.

Cuando se usan frescas en los productos, las obtenemos de un proveedor que nos entrega la mejor calidad. El caso es que los proveedores pueden cambiar en función de la temporada y de la disponibilidad (sucede lo mismo con las semillas de calabaza). Respecto a otros productos con calabaza de Lush, busca la lista de ingredientes y pincha sobre los que te interesen: te llevará a una página llena de detalles.