Las mandarinas parecen naranjas pequeñas, pero su sabor es algo más fuerte y más ácido. El árbol de mandarina es perenne, puede crecer hasta seis metros y pertenece a la familia de las rutáceas.

-El aceite de mandarina presenta un estimulante aroma dulce y cítrico, despeja la mente y ofrece una sensación de bienestar.
-Los aceites y zumos de mandarina iluminan la piel y añaden brillo al cabello, favoreciendo que la cutícula quede plana y refleje así más luz.

En función de la madurez de la fruta cuando se recolecte, el aceite sabrá y olerá de forma distinta. Cuando la piel sigue siendo de color verde, la fruta contiene poca azúcar, por lo que el aceite tendrá un aroma más cítrico y natural. Cuando la piel se vuelve de color amarillo, el aceite se vuelve mucho más dulce. Cuando es de color rojo anaranjado, adopta un toque floral parecido al azahar.

Desde 2005, Lush obtiene los aceites de bergamota, limón y mandarina directamente de una empresa familiar que se dedica a la producción de aceites cítricos desde hace tres generaciones. Las mandarinas se cultivan bajo el sol de Sicilia sin pesticidas, se recogen a mano y se prensan totalmente con la piel.

A veces también adquirimos frutas frescas que proceden de distintos lugares. Para obtener más información sobre los productos y sobre su proveedor, busca la lista de ingredientes de tu producto Lush y haz clic en los que te interesen. Esto te dirigirá a una página con mucha información.